Communist and Socialist (R.B. Kitaj) |
Y
si hubo corrección ante aquello de “multiplicaos”, también tuvo que haber un
eje de principio poluto: ano y pujido, bermejos en el carrillo, y la aorta, ligerísima,
hinchada; y el duro aliento entre vientos hecho coriza, costillar fundido, a
punto de restar al corazón pálpitos, el recate y el trozo mamarracho en todo
ello: la privacidad detrás de las puertas de cada espacio en la ciudad. O. Si hubo,
imitando a Dios, ese curioso error de la imagen de El Hombre. Por indescifrable
que sea al recortar, cada imagen penetró la ciudad y bordó sus sustancias desde
escurridizos líquidos. Y allí, presente El Cuerpo. Estrecha línea tuvo que abrir, a la sombra de toda calamidad, tanta incompatible luz entre agregados y
depositarios, ahora cansados y aburridos de exhibir, bajo orden divina, en público
los sexos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario