Parque publico con pareja y abeto azul (Vincent Van Gogh) |
El abeto
en su coyuntura. El plagio del verde norteño, su plata cercana. Anverso. El
murmullo sobre los copos solo trae otra plata. Domados aros, conjugados
eslabones arriban y se disuelven. En el alba
Debajo
del abeto. Las coronas con sus hormigas pasadas. El negro por el lado de la pequeñez
(detona) en la corteza. El mínimo encuentro en un hilo que parte hacia los
amentos.
Y en las
laderas, el abeto. La raíz de un golfo se busca. En las dioicas tuberías
escucha el dromon del agua la savia correr. Como la envidia en un desierto. O.
Un tramo. Un simple tramo que busca alimentarse en el ruido de la mole.
Y cuando
sorprende la nieve de marzo. El abeto funge, entre la distancia de un copo y
el peso del aire, sus contornos. Y. Apaciguase
La rama
del abeto. Tremor donde aparece el nervio del caos, y luego, la cola de la
ardilla, y de soslayo, el fin de un gancho por la luna que marzo empercha un
poco más arriba que ayer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario