Miguel Barceló, Taula dibuixada, 1991 |
Puesta
factura la espina dorsal su fracción cuando tiro el animal a cocinar. El timón, mando, cien
agujerillos estéreo porosos antes que el crack alarme a la caldera. Mientras, arresto
(poco) mi estado peneciente: el coseno de Isabel, las tetasciclinas de K, las
raspas sumidas, ese trigal sin santo. Cuatro deseos empucho, esta vez que puedo,
tarascas, pequeñez que entiba. Y soy peste, envero aspando, aforado, a
pesar que busco algún fondo para ahogarme como arroz.